El estudio de arquitectura Wallflower Architecture + Design diseñó esta vivienda en Singapur. Los propietarios querían la fachada en blanco. Luego pantallas fijas. Y un patio de centro para la luz y el aire. En una cultura donde la introversión tiene una connotación negativa, querían una espacio para la contemplación interior.
A esta fortaleza le da su fuerza el árbol centenario plantado en el interior, protegido por un estanque, y alrededor del cual gira la casa. Casi ciega al exterior –solo entra la brisa–, se entra a ella por un camino de grava entre una pantalla de madera rítmica y un frondoso muro depolyalthias.
Leer más
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario