Desde lo más alto se pueden divisar bellos paisajes naturales o ciudades llenas de historia difícil de olvidar.
Todos son diferentes, pero tienen algo en común: ayudan a ofrecer un punto de vista distinto de los destinos. Aunque parezca una contradicción, desde la distancia, contribuyen a hacerlos más próximos y contextualizan lo que antes o después se visita al detalle.
Torre de Collserola (Barcelona
Mirador del Fito, en Arriondas (Asturias)
No hay comentarios:
Publicar un comentario