El proyecto presenta algunos cuestionamientos importantes, tanto en el aspecto urbano como en la calidad del espacio y de la optimización del terreno:
El proyecto saca partido de la topografía, aprovecha la posición estratégica del terreno en relación a la ciudad, y pone la arquitectura como protagonista para valorar el metro cuadrado construido y conferir un nuevo aspecto al espacio de trabajo corporativo.
El terreno esta emplazado en la calle João Moura, en el fondo del valle por donde pasa la Av. Sumaré. La calle João Moura es una importante conexión entre los barrios Vila Madalena y Pinheiros. Para el que pasa por la Av. Sumaré, el edificio tendrá una presencia importante. Por eso buscamos atentarnos especialmente a la fachada lateral norte y comprenderla como un gran panel, compuesto por aberturas y por mamparas coloridas. Para quién pasa por la calle João Moura, el piso de acceso esta recuado 10m de la alineación frontal, el doble de lo necesario por ley, garantizando así un respiro para la calle y resaltando la recepción que avanza en dirección a la calle.
El proyecto también saca partido de la topografia accidentada del terreno y acomoda la construcción de manera sutil, dispensando movimentaciones de tierra o escavaciones, incluso para los ambientes subterráneos. Son determinados dos espacios colectivos importantes: la entrada descrita arriba y el piso de la plaza de utilización común en la cuota del fondo del lote (+12m). La plaza es la continuidad del jardín de los fondos, y promueve la conección total del lote en un único plan. Los fondos del terreno están conectados con la escalinata de acceso a la calle Cristiano Viana.
El proyecto saca partido de la topografía, aprovecha la posición estratégica del terreno en relación a la ciudad, y pone la arquitectura como protagonista para valorar el metro cuadrado construido y conferir un nuevo aspecto al espacio de trabajo corporativo.
El terreno esta emplazado en la calle João Moura, en el fondo del valle por donde pasa la Av. Sumaré. La calle João Moura es una importante conexión entre los barrios Vila Madalena y Pinheiros. Para el que pasa por la Av. Sumaré, el edificio tendrá una presencia importante. Por eso buscamos atentarnos especialmente a la fachada lateral norte y comprenderla como un gran panel, compuesto por aberturas y por mamparas coloridas. Para quién pasa por la calle João Moura, el piso de acceso esta recuado 10m de la alineación frontal, el doble de lo necesario por ley, garantizando así un respiro para la calle y resaltando la recepción que avanza en dirección a la calle.
El proyecto también saca partido de la topografia accidentada del terreno y acomoda la construcción de manera sutil, dispensando movimentaciones de tierra o escavaciones, incluso para los ambientes subterráneos. Son determinados dos espacios colectivos importantes: la entrada descrita arriba y el piso de la plaza de utilización común en la cuota del fondo del lote (+12m). La plaza es la continuidad del jardín de los fondos, y promueve la conección total del lote en un único plan. Los fondos del terreno están conectados con la escalinata de acceso a la calle Cristiano Viana.